Algunas estructuras cristalinas
exhiben lo que se llama efecto piezoeléctrico, el cual consiste en que si se
deforma físicamente un eje del cristal por el esfuerzo mecánico aparece una
tensión eléctrica a lo largo del otro eje.
El efecto es reversible, ya que
si se aplica una tensión senoidal, el cristal oscilará mecánicamente
comportándose como un circuito LC con un Q alto.
Modelo equivalente del cristal de cuarzo
Los cristales tienen características de resonancia
electromecánica muy estables (con el tiempo y la temperatura) y que son muy
selectivas (Q muy elevado).
Las propiedades de resonancia son caracterizadas por una
inductancia L muy elevada, un condensador serie Cs muy pequeño (0,0005pF), una
resistencia R muy pequeña, dando un factor de calidad Q=w0L/R (mayor que
100.00) y una capacidad en paralelo Cp (algunos pF Cp>>>> Cs)
Despreciando R la impedancia Z del cristal está dada por:
Los cristales tienen dos frecuencias de resonancia: la serie ws y la paralelo wp. Como Cp >> Cs las dos frecuencias de resonancias están muy próximas.
Reactancia del cristal en función de la frecuencia
Se puede reemplazar la bobina por un cristal en un oscilador Colpitts, Clapp. Para frecuencias.
Ws >w > wp